Hagi era llamado el "Maradona de los Cárpatos", los que lo apodaron así no estaban muy lejos de la realidad, era un jugador brillante, inteligente y con un toque sutil. Fue el líder de una generación única de jugadores rumanos que empezaron a descollar a mediados de los 80s, coincidiendo con la conquista de la Copa Europea por parte del Steaua Bucarest.
Paseo su fútbol por, Italia, España y Turquía, esta última nación vería los logros deportivos más grandes de su carrera a nivel de clubes. La Supercopa europea del año 2000 fue inolvidable para muchos de nosotros ya que el equipo turco liderado por Hagi se impuso a la squadra que posteriormente sería llamada "los galácticos".
Una selección que tampoco se olvidará de él será Argentina, en el mundial de USA 1994 el rumano brilló con luces propias y guió a su seleccionado a un triunfo de 3 a 2 dejando en el camino a la selección sudamericana.
Verlo jugar valía con creces las dos horas ante el televisor, en una época donde no existía el marketing de hoy en día.