COMENTARIO PERSONAL.- El debut de Limberg en la selección no podía ser más promisorio, debutó a los 17 años en un amistoso jugado en Santiago ante Chile, que ganó Bolivia 2 a 1. Los cronistas deportivos de ese entonces lo describían como una mezcla entre "platini" Sánchez y Marco Etcheverry.
Integró el plantel que fue subcampeón de América en 1997, y fue jugador estrella del Blooming bicampeón boliviano (1998-1999). Esas campañas le permitieron dar el salto al fútbol grande del Uruguay, cuando fue contratado por el "tricolor" uruguayo, el club Nacional. La hinchada del "bolso" lo bautizó "bomba" por sus potentes remates de tiro libre.
Después volvió a Bolivia para vestir la camiseta del club Bolívar, equipo con el que llegó a la final de la copa Sudamericana ante Boca Juniors de Argentina.
Posteriormente se puso la camiseta de The Strongest, Oriente, para vestir nuevamente los colores de su Blooming.
Cuando Gutierrez logró el campeonato uruguayo con el club Nacional, parecía que había llegado a su punto más alto, todos en Bolivia teníamos gran respeto hacía él por la fuerza física y vigor que se necesita para jugar en ese país rioplatense. De mi parte la mejor performance que le vi, fue cuando jugó para el Bolívar, porque consiguió tres títulos de campeón boliviano y el subcampeonato continental ante Boca.
No se si habrá sido mejor que algunos jugadores históricos bolivianos, ni si habrá sido una especie de híbrido entre Sánchez y Etcheverry, pero lo que sí estoy seguro es que fue un jugador con mucho valor. Tanto así que debutó a los 17 años en la selección, jugó en el "bolso" y tenía un remate de tiro libre espectacular. Ademas de haber sido uno de los pocos jugadores en el mundo que vistió alternativamente las camisetas de los rivales clásicos en Bolivia, Blooming-Oriente en Santa Cruz y Bolívar-The Strongest en La Paz.